viernes, 30 de enero de 2009

Una vida esbelta

Lo he escrito y me he detenido. Amo en ti la alegría doméstica de vivir, el inicio de un orden que yo sé y no quiero decir; y que ya no es, tampoco. Ah, todo es imposible ya, imposible del todo. Lo sé y no puedo llorar, ni casi arrepentirme. Miro, sencillamente; miro y callo. Te recuerdo. Quiero en ti todo aquello que significas, clara, con una vida esbelta, como una fuente erguida donde el aire se pueda lavar como yo me limpio el alma. Tenme lástima, tenme una pobre, una triste, una amorosa lástima! He llegado a lo más alto de la vida; quisiera que tu recuerdo fuera mi paz, ahora ya sí.

(Coral Romput, Vicent Andrés Estellés)

2 comentarios:

blabla dijo...

ay, antonio

Iskra dijo...

no entiendo muy bien...kizas puerda gracia la esplikacion pero estaria bien.